Ya sabéis que Xabier Olaso, además de ser nuestro profesor, también es escritor. De amplia trayectoria, especialmente, en la literatura infantil y juvenil. Además, también se ha dedicado a la poesía, y a su colección se le acaba de añadir otro libro: Mihi-puntaren puntan (urteari bira 365 igarkizunetan). Es un libro de adivinanzas, pero no uno cualquiera: ha sumado un total de 365 adivinanzas, y dos juegos para el final.
Se nota la emoción en sus ojos cuando habla de literatura, y más cuando se le pregunta por sus obras. Está claro que los años que lleva inmerso en ese mundo no han supuesto gran peso para él; es más, sigue trabajando con ilusión y pasión. Lo que trabaja en la ikastola lo aplica en los libros y viceversa. Hay que tener en cuenta que con estas 365 adivinanzas ha creado unas 1200...
¿Por qué otro libro de adivinanzas?
Soy muy aficionado a las adivinanzas, y hace mucho tiempo que le cogí el gusto a crear más. Para mí es un trabajo de creación muy bonito, muy enriquecedor. Las suelo utilizar como entrenamiento para tener la mente clara y recoger la referencia del mundo desde otra perspectiva.
Es especial, además, porque propone una adivinanza para cada día, durante todo el año.
Así es. El planteamiento ha sido elaborar un calendario. A cada mes le he puesto un refrán, como referencia al uso popular, y una adivinanza a cada día del año. De esta manera, quien lo trate de adivinar realiza un recorrido a lo largo del año, "vuelta al año en 365 adivinanzas", y de paso, hago una mención especial a los cuentos. Además de eso, he introducido dos juegos para trabajar las adivinanzas en familia, en el aula o donde sea, que yo mismo creé; haciendo así que la adivinanza misma sea una forma de jugar, de dinamizar y, por supuesto, de hablar en euskera.
La obra del ilustrador también es digna de mención.
Ha sido, precisamente, un trabajo compartido. Pienso que es muy importante reivindicar la obra del ilustrador o la ilustradora porque, sin dibujo, el libro se queda semidesnudo. En este sentido, le debemos reconocer a Higinia Garay la labor de decorar el libro con más de 200 ilustraciones. Ha sabido vestir las adivinanzas muy bien, y además me ha dicho que ha trabajado muy a gusto, porque para ella también ha sido una gran labor creativa.
Podréis encontrarlo en cualquier librería o, si lo preferís, pasaros por Durangoko Azoka la semana que viene.
Se trata de un libro divertido, tanto para niños como para adultos, para actuar tanto en solitario como en grupo. Está decorada con más de 200 ilustraciones de los colores que ha realizado la ilustradora Higina Garay. Al final del libro, dos propuestas para jugar con adivinanzas en familia o en la escuela, dos fichas de juego.