En general se encuentran a gusto en el aula, lo que les permite conocer otros espacios. De esta forma, los y las niñas de dos años han salido a la calle las últimas semanas, y no solo ellos y ellas, sino que los y las mayores de la clase de un año también se han animado a salir a la calle.
Todo ello les permite a los y las más pequeñas estar en contacto con la naturaleza y así satisfacer su deseo de experimentar.
¡Estar en contacto con la naturaleza es imprescindible para garantizar el bienestar de los y las niñas!